Somos insignificantes como una uña (visualización)

01 octubre 2014

escala1

El ejemplo más usado para visualizar nuestra insignificancia en la historia del planeta es el del calendario utilizado en el Cosmos de Carl Sagan, que sitúa la aparición del ser humano en los últimos minutos del 31 de diciembre. En esta otra visualización, realizada para la excelsa revista Nautil.us, se muestran los 4.600 millones de años del planeta como si fueran un brazo humano. En este caso, los animales habrían aparecido a la altura de la mano, pero la mayoría de formas vivas que conocemos ahora habrían tenido su origen en el primer nudillo (la explosión Cámbrica). Los dinosaurios habrían aparecido hacia el final de los dedos y nuestra historia ocuparía el filo de una uña. ¿No se os bajan un poco los humos?

Enlace: The Greatest Animal War (Nautilus)