
Lo mismo le sucede al protagonista del anuncio, que en el último instante nos muestra una imagen de un Seat Ibiza, con la esperanza publicitaria de que el coche se convierta en nuestra particular ‘obsesión’.
La psicóloga Isabel Larraburu explica en este artículo la presencia de "pensamientos no voluntarios o invasores en la mente". Según explica, se trata de un fenómeno bastante universal, "muchos podríamos preocuparnos y dudar de si somos o no obsesivo-compulsivos" porque los síntomas se presentan en un gran número de personas consideradas "normales”.
Lo que le sucede a Tolstoi con el oso blanco – dice – “es lo que nos pasa a todos cuando queremos dejar de pensar en algo”. “Cuanto más luchamos contra la idea, ésta se hace cada vez más frecuente e insistente. No deja de volver y volver a la cabeza. Siempre que deseamos dejar de pensar en algo logramos el efecto contrario”
5 Respuestas ( Deja un comentario )
Muchas gracias por sacarme de dudas, el tema del anuncio andaba dando vueltas por mi cabeza, y quería averiguar cuanto de verdadero había en lo de Tolstoi.
Gracias ;)
de nada. ahora intenta no pensar en fogonazos... ;-)
Es lo que me pasa cuando quiero olvidar una canción hortera que no hago más que tararearla...¡mejor pensar en osos blancos!
que no era fedor dovtoivsky?
Es curioso, este mismo anuncio lo elegí para realizar un análisi en atropología del comportamiento. Debo decir, que el TOC (trastorno obsesivo compulsivo)como otros trastornos son también hoy en día un blanco de la publicidad en una sociedad que genera cientos de comportamientos "alterados". Quizás la anorexia vinculada a las necesidades de un mercado de belleza y anti obesidad és uno de los más conocidos.
Lo más sorprendente del anuncio es el elevado contenido de estereotipos que trata. Sin entrar en detalles, uno de ellos es la "identidad intelecto-cultural", en este caso Tolstoi, se usa como un icono de referencia a la verdad.
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