Las anguilas eléctricas saltan y Humboldt tenía razón

07 junio 2016




En marzo de 1800, en su famoso viaje por Sudamérica, el naturalista y explorador Alexander von Humboldt quedó impresionado por las anguilas de dos metros que podían encontrarse en algunos ríos y pidió a algunos pescadores locales que le ayudaran a capturar alguna. Para su sorpresa, los nativos siguieron una estrategia bastante rocambolesca, que consistí en introducirse en una charca con una treintena de caballos y mulas provocando una pequeña estampida para agitar el agua. Al momento, varias anguilas saltaban del agua y propinaban descargas eléctricas a los equinos, hasta que quedaban exhaustas y los pescadores podían capturarlas sin peligro.

Desde que Humboldt publicara la historia en 1807 nadie la ha tomado en serio. Especialistas e historiadores la tomaron como una exageración o una alteración de los hechos porque, "como todo el mundo sabe", las anguilas no saltan ni salen del agua para dar descargas. Hasta que el biólogo Kenneth Catania descubrió que una de las anguilas del acuario en el que trabajaba en la Universidad de Vanderbilt se resistía a entrar en la red y pasaba a la ofensiva.

Más info y vídeos en: Las anguilas eléctricas saltan y Humboldt tenía razón (Next)